29 meses perdidos y malgastados.

nuestros abnegados ediles

Dos años y medio de legislatura municipal son más que suficientes para comprobar que los programas y eslóganes que lucieron en sus carteles y folletitos solo fueron cuentos, mentiras y promesas para trincar votos y que al día siguiente enterraron en el cajón de los “olvidos y despropósitos”.

Aquel 27 de Mayo los isleños e isleñas decidieron no dar la mayoría absoluta a ninguno de ellos, castigó a la PAndilla y les dejó empatados con sus otrora enemigos de plenos y notitas de prensa, (solo unos días antes la PPedemonte pedía al heredero de Antoñito que controlara a sus muchachos, que no les insultaran) y con más hartura por los anteriores que convencimientos, les dieron una ligerita ventaja a los Fernanditos, quizás también con la oculta esperanza de que la línea directa con los jefes de Sevilla y Madrid, traería algo de los dineritos e inversiones que prometían.

Pero llegó el 28 y los enemigos, los que hasta entonces y durante cuatro años se llevaban a cañonazos, decidieron que por “la gobernabilidad de La Isla”, (como si La Isla fuera ingobernable y con lo dóciles que somos) que había que enterrar programas y promesas, que había que olvidar las broncas y los insultos mutuos y que había que pactar por el bien de la ciudad y contra un posible alcalde ¿de izquierdas?

Y claro, como dijo Maricha con una de esas frasecitas que pasaran a la lista de perlas sin cultivar: “El tiempo pone cada cosa en su sitio” y 29 meses después ha quedado patente que los cañaillas somos fácilmente gobernables, que nos conformamos con las necesarias, justas y justificadas subidas en los impuestos municipales, que nos conformamos con que se nos lleven esa minucia de milloncitos de la caja, con que nos estafen duplicando facturas, con la necesidad de ayudar a los adjudicatarios de servicios pagándoles intereses de demora y que con toda justicia nuestros abnegados ediles sigan cobrando esos peazosdesueldos por hacer de La Isla una Ciudad 10; Luego los del Pacto Infame tenían razón, ¿para que, tanto programa? si con La Magna y la Guardia Salinera ya tenemos suficiente.

Y que decir de los Fernanditos, línea directa, pero con ING, inversiones y dineritos con cuentagotas, poquito a poquito, que visualicemos las bonanzas milagreras psoistas (lo de milagreras porque lo que realmente las están viendo son los curas: carmelitas, iglesiadelcarmen, iglesiamayor…) y por supuesto, aprovechar toda la información que tienen a su alcance para serrarle las patas al sillón de Debernardo y también poquito a poquito ir quitándole votitos a los peperos… que algo queda.

Pues eso, que las barriadas, los curritos y curritas, los de autobús a las seislamañana, los jóvenes y jóvenas, los de la puertadelsae… llevamos 29 meses perdidos y malgastados; Menos mal que la campañita electoral está cada día mas cerca con sus programitas, eslóganes y cartelitos.