A mediados del siglo XIII comenzó a surgir un poblado en torno al Castillo de San Romualdo, que entonces era conocido como Logar o Lugar de la Ponte, después como castillo de Zuazo y en época árabe como alquería de Rayhana. Alrededor de este ribat y en torno al Real Carenero, atarazana situada junto al Puente Zuazo, se formó la actual ciudad de San Fernando, La Isla

27 de junio de 2009

A la sombra de los cuarteles y echarse a dormir


Antes y después, es decir, siempre, este pueblo ha vivido a la sombra de los cuarteles; en principio por su propio origen y después por parasitismo económico y falta de ideas políticas para confeccionar un proyecto de ciudad.

La Isla, desde siempre ha vivido por, para y de los cuarteles; No hace mucho tiempo que San Fernando ha estado gobernada por alcaldes con sable y galones, toda efeméride pasaba por el consiguiente desfile, no había comercio que el 90% de su facturación fuera para Defensa, no había bar ni chicuco que no viviera de vender bocatas y tortillas a los soldados, los “Efectos Navales” hacían su agosto, las lavanderías olían a pantalones de camuflaje… pero los tiempos han cambiado, ya no existe la mili obligatoria, el ejercito se ha modernizado, las unidades están continuamente reubicándose pero este pueblo pretende seguir viviendo a la sombra de los cuarteles, al compás de las campanas que llaman a misa y procesión, sin visión de futuro, sin proyectos, sin ideas pero con una tremenda y ya tradicional llorera y congoja cada vez que un soldado se va.

Todos y cada uno de los políticos que han sido y son, nos han hecho creer que no hay Isla sin Armada, que no podremos vivir sin el chusco y el machaca, sin desfile o procesión, sin Varela o cofradía; todos y cada uno de estos politiquillos aficionados nos han hecho creer que la política es solo para ellos, que no es necesaria la participación, que para pensar ya están ellos…

Y claro está: ¡Con estos mimbres, estos cestos!

Mientras ellos y otros, por mimetismo, lloriquean a moco tendido, la marcha de otra unidad militar, La Isla se nos muere, anémica y saqueada, bicentenaria pero sin valores, con guardia salinera pero sin industrias, con tranvía pero con comercio subvencionado, con plan zapatero pero sin puestos de trabajo, con obritas en las aceras y con las calles cortadas, con delincuencia creciente y vandalismo pero sin policía local, con caos circulatorio pero sin plan de trafico, con desfalcos pero sin responsabilidades políticas, con plataforma ciudadana pero sin reacción de los isleños, con corpuscristis repetidos pero con la olla vacía…

Y seguimos llorando por los cuarteles.

Foro tenía razón, La Isla está enferma y muy pronto en la UVI.

1 comentario:

Paco Piniella dijo...

Es verdad que de las ciudades de la Bahía San Fernando parece languidecer permanentemente sin salida posible a la crisis, sin alternativas industriales o de servicio. Y la lista más votada en la oposición.