No importa, solo son puestos de trabajo.

La inutilidad e improvisación con la que se ha desarrollo el último pleno de esta legislatura ha sido el broche de oro a cuatro años de plenopantomimas, el triple salto mortal del Gran Circo en que han convertido lo que se supone debería ser el máximo órgano democrático municipal.

Tanto despropósito, tanta desvergüenza y la puesta en escena de los tres grupos que allí se sientan, no pueden responder a la casualidad, la mano negra que los mariscadores presienten sobre su proyecto no es una entelequia, no es una sombra, debe ser una realidad tan manifiesta, tan programada y orquestada que de lo contrario sería imposible creer que la sucesión de trabas, problemas técnicos, dilaciones, reparos y hasta “faltas de ortografía” en documentos fueran ciertas o fruto del azar y mucho menos de la incompetencia o falta de conocimiento de técnicos y políticos. Está claro, existe un autentico complot, de intereses e interesados para que este proyecto no vea la luz.

El proyecto es tan claro, tan factible, tan viable, tan sostenible, tanto económicamente como medioambientalmente hablando, tan previsiblemente duradero, con una minima inversión inicial por parte de la administración y que posteriormente no necesitaría ninguna otra aportación publica por que sería autosuficiente, y que reportaría que el trabajo y la mano de obra que ahora se realiza en durísimas condiciones, precariedad y de forma no regulada, furtiva y semiclandestina, se reconvirtiera en legal, generaría mas afiliados a la seguridad social, cotizantes de impuestos, alabado y reconocido por técnicos y cargos públicos; En definitiva, la creación de 200 puestos de trabajo regulados y estables, que solo se puede justificar el no apoyo y los “problemas” que está padeciendo por la existencia de persona o grupo de personas cuyos intereses se verían perjudicados por el proyecto de la asociación de mariscadores y que están presionando para que no se vea realizado.

Existe la materia prima, existe la actividad pues se ejerce desde que los primeros hombres habitaron estas tierras y sus zonas intermareales, existen los trabajadores; No se trata de inventar nada, de crear nada nuevo, solo se trata de transformar las condiciones y de cambiar la forma de repartir los beneficios que genera la actividad.

Ahora doscientas familias de la Bahía malviven del marisqueo, ejercen de forma furtiva, sin contrato, sin seguridad social y en unas condiciones laborales tercermundistas, pero de su trabajo se benefician los restaurantes, los pescaderos del mercado, los vendedores de cebos vivos y la depuradora de zona franca a la que solo tres o cuatro mariscadores que poseen licencia y la pueden costear, llevan sus moluscos. La actividad genera mucho dinero, pero mientras que algunos se los meten en sus cuentas, los otros los que se tiran al fango, los mariscadores apenas tienen para comer ellos y sus familias.

Mientras, a los políticos se les llena la boca alabando el proyecto y proclamando apoyos que nunca llegan, los técnicos y funcionarios lo bendicen como viable y bueno pero les multiplican de reparos y tecnicismos que “corregir”… dos largos años de reparos, dos largos años de promesas, pero dos largos años de desesperación y desesperanza para los mariscadores y sus familias.

No me creo “la inutilidad y la improvisación” del pleno, no me creo la caradura del alcalde al llevar el tema por cuarta o quinta vez a la mesa sin “resolver” reparos e inconvenientes, y menos me creo el supuesto apoyo de Nieto y López, que indolentes asisten a tanto despropósito sin “dar un puñetazo sobre la mesa”.

Luego han llegado los postres, como llegan los postres después de cada pleno, se reparten los comensales criticas mutuas, acusaciones mutuas para el titular de prensa, para la foto periodística, que sirvan a los coreógrafos, a los comentaristas profesionales de Internet, a los dos o tres que cada partido paga por tener catorce horas enchufado al ordenador, los dos o tres de los mil Nicks, los alabadores propios y azotes ajenos… ¡que espectáculo! ¡Cuánto circo! ¡Cuanta basura y cuanta mentira!

Solo un mal nacido puede decir públicamente “No se puede jugar con los sentimientos de la gente” mientras juega al gato y al ratón con los sentimientos y el pan de la gente, a nadie le extraña las enormes cantidades de subvenciones e inversiones a empresas y proyectos que a la postre no han generado puestos de trabajo, pero si se utiliza como excusa la supuesta privacidad de los mariscadores para renegar las ayudas que solicitan, basta ya y jueguen limpio.

Pues eso, que si una servidora fuera honesta y encima fuera Consejera o Directora General de Pesca o Delegada provincial o alcaldesa, desde hace dos años los mariscadores tendrían su nave funcionando, pero como según esos “buenos amigos” que me escriben anónimamente, solo soy una puta bruja y una niñata de mierda, me tendré que seguir comiendo las uñas de rabia y de impotencia y al igual que los mariscadores, tendré que seguir esperando a que el alcalde solucione los reparos del interventor.